Esta última semana he tenido el blog abandonadillo por la carga loca de trabajo que implica el final de curso, pero ya vuelvo a ser libre para darle un poco de vidilla. Voy a empezar haciendo un breve repaso (libre de spoilers) de lo que ha sido la segunda temporada de The Americans. La idea de hacerlo surgió de la enésima vez en que leí la pregunta del millón: «me encanta Homeland, ¿merece la pena que le dé una oportunidad a The Americans?». ¿Cuántas veces se hace esta pregunta al cabo del día? Es curioso, pero es algo que lleva siendo así desde que se estrenó la serie, con esa cabecera que, efectivamente, sí que recuerda bastante a la de Homeland.

Si no conoces The Americans, solo te diré dos cosas: 1) te lo estás perdiendo, eh, te lo estás perdiendo, ¿me oyes? Que las temporadas pasan y tú te lo pierdes. Te lo estás perdiendo; y 2) se parece a Homeland lo mismo que mi madre a Scarlett Johansson. Tanto mi madre como la musa del cine que podría desatascar desagües con sus labios comparten un rasgo esencial: son mujeres. Pues bien, The Americans, al igual que Homeland, es una serie de espías. Fin de la similitudes.

De hecho, si queréis mi opinión totalmente subjetiva, después de haber visto la tercera temporada de una y la segunda de otra, creo que The Americans está ahora mismo en un momento mucho, mucho mejor. Pero no me hagáis mucho caso, porque soy de los que se aburrieron como una ostra con la tercera entrega de las aventuras de Carrie 'Locadeloshuevos' Mathison, y sé que a muchos otros fans les ha parecido una temporada igual de buena que las anteriores.


Volviendo a la serie que nos ocupa, de su primera temporada se dijeron casi tantas cosas buenas como malas. Que los actores estaban correctos, que el guion era sólido, que el tema era interesante y que la ambientación ochentera estaba muy bien conseguida sin caer en las típicas extravagancias en las que suelen incurrir las ficciones que se ambientan en este periodo. No obstante, también se la tachó de ser demasiado fría, de no conectar emocionalmente con el espectador. En resumen: correcta a nivel técnico, pero fría en sentimiento.

Vaya por delante que yo jamás entendí estas críticas. Sin ser la serie más emocional del mundo, la supuestamente poco expresiva Keri Russell me resulta mucho más entrañable en su papel de femme fatale que Claire Danes haciendo pucheros, pero imagino que ahí entran los gustos personales sobre estilos de interpretación.


Sea como fuere, esta segunda temporada, The Americans parece haber sabido escuchar las críticas y aprender de ellas, lo que habla mucho en su favor. Y es que en esta segunda tanda de episodios hemos tenido mucha más emoción, calidez y, sobre todo, se ha hecho más énfasis (aunque ya existía en la primera, ojo) en la dimensión humana del conflicto. Lo importante no son las peripecias de una pareja de espías en plena Guerra Fría: son las peripecias de un matrimonio con hijos en plena Guerra Fría. No son robots, después de todo, sino seres humanos, por muy espías que sean.

Esta segunda temporada ha tratado de explotar eso, dándole también más papel a los hijos. Y en mi opinión, han acertado plenamente, porque no solo los personajes han ganado en profundidad, sino que el propio argumento de la serie resulta más emocionante. Por otro lado, con la trama de Nina y el agente Beeman también han buscado un toque más humano, más personal, y de nuevo les ha salido bien.

En resumen, para mí, esta segunda temporada ha sido mucho mejor que la primera, que ya me parecía buena de por sí. Hay más acción, más intriga, más tensión, y todo ello lo han conseguido explotando la humanidad de los personajes. No deja de resultar curioso como, mostrándonos lo vulnerables que pueden llegar a ser unos y otros, consiguen hacer que la trama de espionaje sea más emocionante.

Y el final es muy bueno, de los que a mí me gustan: cierran las tramas principales de la temporada, pero al mismo tiempo plantan las bases para una tercera temporada potente.

Si no habéis visto la segunda temporada, os recomiendo que os pongáis con ella pronto. Y si ni siquiera habéis visto la primera, mandad a la mierda a la loca de Carrie y concededle una oportunidad a Elizabeth.